Nuestra Historia
Hace 9 años, dos mujeres emprendedoras, Sharon y Soledad, fundaron Chocolates RURO con un sueño de crear chocolate artesanal de alta calidad. A pesar de los desafíos y obstáculos, como las dificultades económicas y la pandemia, nunca perdieron la esperanza. Con dedicación, esfuerzo y el apoyo de mujeres colaboradoras y diversas instituciones, lograron superar las adversidades. La preferencia de sus clientes locales, nacionales e internacionales, junto con el respaldo en redes sociales, les dio fuerzas para seguir adelante. Chocolates RURO ha sido reconocido con premios nacionales e internacionales, lo que reafirma su compromiso con la calidad. Usan cacao nativo de la variedad CHUNCHO de la amazonia cusqueña, conocida por su sabor único, y recientemente incursionaron en el mundo del café, cultivado en su parcela familiar cerca de Machu Picchu. La empresa cuenta con un taller de producción en Cusco y una tienda de ventas en el centro histórico, donde brindan una atención especial a sus clientes.
Misión
“La misión de Chocolates Ruro es producir y ofrecer productos saludables, originales, orgánicos y naturales, con un enfoque de atención personalizada y respeto hacia nuestros clientes, proveedores y el medio ambiente. Nos comprometemos a promover una nutrición saludable para todos, utilizando el cacao y el café, recursos ancestrales y universales, para brindar lo mejor a nuestra comunidad”.
Visión
“Nuestra visión en RURO CHOCOLATES se enfoca en contribuir a un mundo mejor, promoviendo la sostenibilidad ambiental, un trato justo a los agricultores y las comunidades, y una nutrición sana y auténtica que mejore la salud de las familias. Creemos en la importancia de cuidar la naturaleza para las futuras generaciones y en aportar nuestro grano de arena para enfrentar los desafíos globales, buscando siempre un cambio positivo en la sociedad, la economía y el medio ambiente”.